Probar o no la Ayurveda, eh ahí el dilema…
Hace un año me fui a la India, después les contaré más sobre
ese increíble y enriquecedor viaje que tengo que volver a hacer, y una de las
razones es para aprender más sobre esta milenaria terapia, medicina y tradición
cultural. No voy a decir que no fue algo
raro y hasta incomodo, pero realmente me permití disfrutar ese masaje por el
que además pagué tan poco que se sorprenderían. Pero más bien les tengo que
contar sobre esta corriente de balance y bienestar.
Muchos pueden asociar “Ayurveda” con tratamientos carísimos
en SPAS de lujo, pero en realidad la Ayurveda comprende mucho más, es toda una
ciencia sobre la vida y arte de vivir.
La palabra Ayurveda viene del sanscrito “Ayush” vida y “veda”
conocimiento acerca de. Lo interesante de la Ayurveda es que toca cada aspecto
de la vida, desde psicología y cómo tratar diferentes enfermedades hasta
remedios caseros prácticos, regímenes alimenticios, recomendaciones para
mantenerse saludables y ayuda para alcanzar la meta espiritual más buscada, la
autorrealización. También ofrece soluciones de salud para cada aspecto: cuerpo,
mente y alma.
La medicina Ayurvedica nació en India hace 5000 años y es
considerada como el sistema del cuidado de la salud más antiguo. Esta práctica holística consiste en ver a la
persona como un ser completo, en donde se debe tomar en cuenta el sueño,
energía, hábitos de limpieza, bienestar emocional y todo esto se conecta con el
estado físico,
El estilo de vida Ayurvedico está empezando a ganar auge y
es una disciplina completa, en armonía con los ritmos de la naturaleza,
requiere tomarse tiempo en la mañana para meditar, hacer yoga o someterse a un
masaje. Hay quienes incluso se convierten al vegeterianismo el cuál es
recomendado.
Los principios de la Ayurveda
Se enseña que cada persona es una mezcla de los tres Doshas
o principios que rigen el cuerpo humano. Estos son Vata, Pitta y Kapha, aunque
a veces pueden predominar uno o dos Doshas. Las enfermedades son producto de un
desequilibrio en los Doshas.
Los tipos de Doshas:
Vata es el tipo del viento o aire. Este tipo de personas
tienen una energía alta, son creativos, dinámicos, flexibles y tienden a ser
secos y frescos. El tipo Vata es delgado, con manos y pies fríos y piel seca. Si
hay desequilibrio en este Dosha se manifiesta con ansiedad, nerviosismo,
inseguridad, insomnio, constipación, artritis, movimiento excesivo y falta de
concentración. Son sensibles a problemas de sueño y digestión.
El tipo Pitta es de fuego y sol. Tienden a tener excelente
digestión, son intuitivos, son buenos para debatir y en materia intelectual.
Son descritos generalmente como calientes, inteligentes y exactos. Aquellos que
son Pitta tienen cuerpos medianamente moldeados, piel grasa y buen apetito. Cuando
existe desequilibrio los Pitta pueden explotar de irá, impaciencia, celos y
ganas de competir. Son propensos a enfermedades inflamatorias desde agruras a
irritaciones de la piel.
Los Kapha son de tipo agua y tierra. Estos personajes son
estables, centrados, cariñosos, compasivos con un enfoque positivo, con un
nivel alto de resistencia y fortaleza y un sistema inmunológico fuerte. Son
considerados como personas serenas y calmadas. En aquellos que predomina el
Dosha Kapha se suelen encontrar personas con sobrepeso, lentas, calmadas y
deliberadas. Cuando este Dosha se encuentra en desequilibrio sufren de
congestión, hinchazón, y se suelen encontrar enfermedades como diabetes,
depresión, aumento de peso y falta de motivación. Ejercitarse, bailar y viajar
pueden ser benéficos para ellos.
Ahora puedes saber que Dosha tienes y buscar el equilibrio
para mantener tu salud en todos los aspectos.
No te pierdas el próximo post sobre el masaje Ayurvedico y
sus beneficios.
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