"Hygge", no lo compres, adóptalo!

Seguramente has escuchado el término "hygge", cada vez más popular y la palabra del año en 2016.

El hygge es un estilo de vida en Dinamarca, aunque con la incesante búsqueda de felicidad y placer cada vez vemos más esta tendencia en Norte América, convirtiéndola no sólo en una forma de vivir sino en un producto aspiracional que se vende en los supermercados o tiendas de decoración. Sin embargo la esencia del hygge en Dinamarca o en cualquier parte del mundo no es una vela, no es una cobija o cualquier objeto que pueda comprarse, es una filosofía que inculca la importancia en la compañía de las personas más cercanas y el compartir momentos  o disfrutar los que nos dan la satisfacción en el instante mismo.

Empieza por gozar tu café o té en la mañana sin apresurarte mientras te arreglas o manejas al trabajo. No tienes velas?, consigue incienso en barita por menos dinero o disfruta del aroma de tu ropa recién lavada. Justo en momentos como los que estamos viviendo desde hace un par de meses, en el que muchos estamos trabajando en casa y no podemos salir más que a lo indispensable, aprovecha el tiempo con los tuyos, organiza juegos de mesa y no hagas otra cosa a la vez, la idea es vivir el momento. Cocina tu comida favorita con tu persona favorita mientras platican de anécdotas felices.
Puedes quedarte en toalla o bata por 45 minutos? Puedes leer un libro o disfrutar la vista de tu ventana. El plan es que hagas algo extraordinario de las cosas sencillas del día a día, y que empieces a adoptar poco a poco este estilo de vida que no requiere que compres nada, porque la felicidad no se puede comprar.

Nos hemos dado cuenta que a pesar de tener el poder económico para comprar no podemos salir a hacerlo o lucirlo, y que lo único que realmente vale la pena es cómo nos relacionamos con nuestra familia y amigos, que lo que más extrañamos no son las cosas materiales o los lugares lujosos y concurridos sino ir a casa de nuestros padres o primos, la comida de los domingos o simplemente la posibilidad de ir a cuidarnos una hora en el gimnasio o en nuestra clase favorita de pilates.  Así que ya sabes, a partir de hoy no trates de llevar una vida acelerada y de acumulación o ir por lo que dicta la moda. Intenta dejarte sorprender por los momentos inesperados y que hacen que la vida realmente valga la pena, ya sea al lado de tus seres queridos o sola consintiéndote con tu bebida favorita.